¡Bienvenidos a nuestra casa! ¿Quieren conocernos un poco más? Esta es nuestra historia

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AnaAlmagro

Todo comienza en el año 1975

Rafael y Lola decide volver a España después de 13 años desde Darmstadt, Alemania

Todo comienza en el año 1975 cuando el matrimonio formado por Rafael y Lola decide volver a España desde Darmstadt, en Alemania. Allí habían emigrado 13 años atrás como muchos trabajadores españoles a buscar una vida mejor. No vienen solos: les acompañan sus dos hijos. Alemania les trató muy bien y fueron muy felices allí pero vivir separados de la familia era cada vez más difícil. Así que deciden instalarse en Sevilla (Lola se enamoró de la ciudad desde que la visitó en la Luna de Miel).

A la hora de buscar un hogar se cruza en su camino esta casa. No lo dudan y viendo su potencial deciden emplear los ahorros conseguidos en Alemania para comprarla, adecuarla un poco y comenzar a vivir en ella. Como era una casa demasiado grande, deciden obtener ingresos alquilando habitaciones a estudiantes y a trabajadores. España era, por aquella época, una gran desconocida para los turistas. Pero poco a poco se animan a descubrirla y es más frecuente la visita de viajeros a Sevilla. Y en vez de recibir a trabajadores y estudiantes, son más frecuentes los turistas extranjeros.

Los comienzos fueron duros pero poco a poco la situación va mejorando y la familia comienza a realizar obras y cambios en la casa. Además ya no eran 2 sino 4 los hijos pues en 1981 nacen la gemelas Ana y María. En 1986 empieza un proyecto de reforma de la casa que continúa entre 1995 y 1996 que es cuando la casa adquiere la estructura que posee ahora.

A partir del año 2005, son Ana y María las que deciden poco a poco ir tomando las riendas del negocio

A partir del año 2005, son Ana y María las que deciden poco a poco ir tomando las riendas del negocio. Pese a contar con estudios universitarios en diferentes campos, no quieren dejar la actividad con la que han crecido. Y recibir clientes de todas partes del mundo, acogerlos y ayudarles a descubrir la ciudad, más que un trabajo es un placer.

La familia siempre intenta contar con habitaciones cómodas y prácticas para los clientes lo que implica realizar constantes trabajos de renovación. La última: a finales de 2017 con el objeto de actualizar las instalaciones y darle un toque moderno y cuidado que esperan, sean del gusto de todos.